Cine Retro: Regreso al Futuro (y un par de cosillas sobre sus secuelas)

Cada uno tiene sus aficiones, supongo que hasta aquí estamos de acuerdo.

  Luego, subiendo un peldaño más, nos encontramos la pasión de cada uno. Esa temática, hobby, o expresión artística que nos despiertan uno o varios sentimientos intensos cada vez que nos deleitamos con su práctica y sobre la que podríamos hablar durante horas si nos dan suficiente cuerda.

Personalmente, una de las mías (entre otras muchas) es el gran meta-arte que son los videojuegos, por lo que disfruto enormemente cuando escucho hablar a alguien que entiende de verdad sobre este tema y sabe lo que tiene entre manos, aparte de comprender perfectamente la importancia de los títulos clasificados como “retro” en el mercado actual. Es decir, alguien que sepa un poco de todas las épocas y géneros de este fabuloso ocio.

  Este es el caso del canal de YouTube Consolegas, que aparte de lo dicho, mantiene un sentido muy personal de hacer las cosas, ofreciendo algo distinto, muy cercano, y en el que se nota que hay un importante trabajo de documentación detrás de cada vídeo.

www.youtube.com/channel/UC0qzTjqoMSbiJ_aM7KDV99w

  Personalmente disfruto mucho de varios de sus trabajos como la divertida saga Lo peor de lo mejor( con varios invitados de peso), tops, y reviews. Pero es que además crea un material muy original y tiende a hablar de títulos más bien poco conocidos que destaquen por alguna razón, por lo que siempre termino aprendiendo alguna cosa con este canal, aparte de descubrir títulos muy interesantes, y gozando de la temática retro del canal, que en ocasiones me hace sentir como si viajara en una máquina del tiempo.

  Lo cual me viene de perlas, pues en el post de esta semana vengo a presentaros la que es una de mis películas favoritas de ciencia-ficción la cual es todo un referente dentro del género en el tema de viajar a épocas pasadas o futuras, y seguro que es aquella en la que muchos pensáis cuando sale el tema. Un clásico ochentero indispensable.

  Buenas gentes, sin más dilación, te dejo ya mismo con la trama de esta película. Te aconsejo que te agarres fuerte porque el viaje va a ser movido.

  Para ver como empieza esta historia, debemos desplazarnos hasta la pintoresca población norteamericana de Hill Valley, y más concretamente al año 1985 de un universo alternativo al nuestro pero muy similar, casi idéntico.

  La vida parece transcurrir plácidamente en dicho lugar. Sin embargo, las cosas están a punto de dar un giro impresionante para el protagonista de esta historia, el adolescente Marty McFly (interpretado por el ídolo adolescente de su momento Michael J.Fox), un chaval muy de su tiempo al que los estudios parece que le van regular, pero que resulta ser todo un virtuoso del monopatín y que sueña con llegar a convertirse en toda una estrella del rock.

  Sin embargo, las cosas no van muy bien que digamos en casa del bueno de Marty, pues el padre de família George McFly (Crispin Glover) es un oficinista sin chispa y de carácter derrotista que a duras penas puede vivir bajo la presión ejercida por su supervisor Biff Tannen (Thomas F.Wilson), el cual no solo es un palurdo bueno para nada que se aprovecha del talento de George, sino que además fue el matón que le hacía la vida imposible en la secundaria.

  Por si esto fuera poco, Marty tiene serias sospechas de que su madre Lorraine (interpretada por Lea Thompson) no solo le da a la botella cosa mala, sino que es una mujer que con el paso de los años se ha convertido en una mujer triste de vida similar a una monja.

  Por suerte, Marty no solo cuenta con su gran pasión y determinación por la música para alegrar sus días, sino que tiene el respaldo incondicional de su fiel novia Jennifer (Claudia Wells), y su mejor amigo en todo el mundo, el excéntrico científico doctor Emmet Brown (Christopher Lloyd), un genio incomprendido que constantemente desarrolla todo tipo de aparatos estrafalarios que rara vez funcionan, y al que Marty llama cariñosamente “Doc”.

  Un buen día, tras pasar un cierto tiempo sin dar señales de vida, Marty recibe una extraña llamada de Emmet “Doc”, en la que le pide que se reúna con él en el párking del centro comercial Twin Pines. En palabras del propio “Doc” Brown, “Si todo sale según lo previsto, vas a ver algo acojonante”.

  Y créeme si te digo que no es para menos. Pues tras un breve y exitoso experimento, Marty descubre que Doc ha convertido un automóvil Delorean en una máquina para viajar en el tiempo. Para ello no hay más que poner la fecha de destino en el panel de mandos, cargar el condensador de fluzo, y darle gas a fondo al coche, de modo que cuando este alcanza la cifra de 140Km/h… ¡bam!, el conductor y pasajeros de este particular vehículo aparecen instantáneamente en el mismo lugar en el que se encuentran, pero en la fecha fijada previamente.

  Sin embargo, hay un pequeño problema. Y es que para que este milagro de la tecnología se produzca, el condensador de fluzo necesita una carga de energía de 1’21 gigavatios (una bestialidad) que Doc Brown consigue gracias a cargas de plutonio con el que hacer funcionar el pequeño generador nuclear conectado al condensador de fluzo… pieza imprescindible para que los viajes en el tiempo sean posibles. Y claro, ¿de dónde saca uno cargas de plutonio?, no es que vaya a tanto el litro en la tienda de la esquina precisamente. De modo que al científico protagonista de esta historia no se le ocurre otra cosa que darles el cambiazo a un grupo de terroristas que robaron el plutonio para que Doc les fabricara una bomba. Como seguro podrás imaginar, dichos terroristas se mostraron “ligeramente molestos” cuando descubrieron el engaño. De modo que acuden al lugar del experimento, armados con bazokas y ametralladoras, para expresar su disconformidad para con el buen doctor y coserle a balazos.

  Marty a duras penas tiene tiempo de llorar la muerte de su mejor amigo en la vida, pues debe apresurarse para salvar la suya propia de manos de los malévolos terroristas, que ahora le persiguen para matarle también y así no dejar testigos. De modo que nuestro protagonista monta a toda prisa en el Delorean de Doc, iniciando una peligrosa fuga y conectando accidentalmente el dispositivo de viajar en el tiempo. Así, y tras un complicado aterrizaje, Marty descubre que ha logrado escapar de los terroristas pero que se encuentra atrapado en el Hill Valley de treinta años atrás… eso es en 1955.

  Marty descubre que esta puede ser una excelente oportunidad para volver de nuevo a su época a tiempo de salvar la vida de su mejor amigo, sino fuera por dos “pequeños” obstáculos. El primero, que deberá convencer al Doc Brawn del pasado de que los viajes en el tiempo son reales para que pueda ayudarle a conseguir la detonación energética necesaria para activar el condensador de fluzo del Delorean… y el otro… bueno, con el otro “pequeño obstáculo” te vas a quedar de piedra. Y es que al viajar al pasado, Marty a iniciado una reacción en cadena que ha saboteado la primera cita de sus padres. Por lo que si no consigue unirlos de nuevo, puede llegar a desaparecer para siempre.

  Y hasta aquí puedo contarte. Si nunca has visto esta película y quieres seguir como sigue, ya sabes lo que te toca, porque yo no te lo voy a contar.

  Sea como sea, tanto si ya conoces esta producción de haberla visto o solo te suena de oídas, vale la pena fijarse un momento en todo el personal que está involucrado en la producción de esta película del 1985, empezando por el propio director que no es otro que el gran Robert Zemeckis. Poca broma con esto, que este hombre ya venía de filmar Tras el corazón verde, pero a lo largo de su carrera ha trabajado en verdaderos pelotazos de grandísimo éxito como Lo que la verdad esconde, ¿Quien engañó a Roger Rabbit? (que también es una de mis favoritas), Campo de honor, Forrest Gump, House on Haunted Hill (obviamente la de 1999), Contact, la cinta de animación Monster House, Náufrago, y Agárrame estos fantasmas, entre otras. Discutiblemente, sus trabajos menos destacables quizás sean Ghost Ship y 13 Fantasmas, que tampoco es que sean especialmente malas y cuentan con grandes momentos. Vamos, que este señor tiene un palmares de lo más respetable y muy digno de tener en cuenta.

  De hecho, me viene al pelo hablar de este buen señor y su trabajo en esta película de Regreso al futuro, pues de entrada, no estaba previsto que hubiera ninguna secuela. No obstante, la película se convirtió en todo un pelotazo por todo lo alto que triunfó a lo grande en taquilla, cosechando una legión de fieles seguidores que sigue creciendo incluso a sus casi 36 años de su estreno (al escribir estas líneas). De modo que las dos secuelas (Regreso al futuro parte II y III) no se hicieron de rogar e incluso se filmaron casi de manera seguida, dejando solamente unas tres semanas de descanso entre una y la otra. Películas para las que, por cierto, volvieron a contar con el gran Zemeckis (entre otros involucrados en la primera película), lo cual fue un gran acierto, porque este equipo supo hilvanar de manera soberbia la trama entre las tres películas de la saga, aprovechando al máximo lo que tenían entre manos para crear una historia maravillosa que culmina inmejorablemente con la tercera entrega, cerrando situaciones que se producen durante toda la saga, pequeños detalles que los ves como anecdóticos en la trama, que parecen tener poca importancia o ser un simple gag, pero que terminan siendo cruciales además de pillarte completamente por sorpresa cuando se revela su importancia. Y eso, apreciadas buenas gentes, es lo que se logra con una historia bien organizada y un gran script que la respalde.

   Además, comentar que este pedazo de cineasta de gran talento no solamente dirigió la saga, sino que además escribió el guión de la misma junto a un sujeto clave para la película y que terminó formando parte del gran equipo que daría vida a la saga. Me estoy refirierndo a Bob Gale, celebre guionista cuya participación en Regreso al Futuro le valió ser nominado al Oscar. Por lo que no es de extrañar que fuera elegido para escribir también el guión de las dos secuelas, además de ser uno de los principales productores de toda la saga junto al mismísimo Steven Spielberg (¡Spielberg, queridos lectores, Spielberg os digo!). Como ya podréis suponer, no solamente Gale y Zemeckis se involucraron con ganas en este proyecto desde el momento que recibió luz verde para llevarse a cabo, sino que Spielberg fue una parte muy activa de su realización y creación de todo el universo de Regreso al futuro.

   Pero me estoy liando. Para no enredar mucho el tema, mejor si en este post me centro solamente en la primera película (aunque no te prometo nada).

  Aunque bueno… la verdad es que no se por dónde empezar, pues se trata de unas de estas producciones cuya historia tras las cámaras llega a ser tan rica como la película en sí, incluyendo la elección de los actores.

  Para empezar, cabe decir que Michael J.Fox fue elegido desde el principio para dar vida al divertido y dinámico Marty McFly. Sin embargo, este se encontraba en pleno rodaje de la serie que en España conocimos como Enredos de familia (Family Ties en versión original) y la productora no quería “cederle” así como así, de modo que empezaron el rodaje de Regreso al futuro con el actor Eric Stoltz. Y ojo ahí, que Eric Stoltz tiene una trayectoria profesional como la copa de un pino y es un actor que ha participado en numerosas películas de éxito (interpretando al camello Lance en Pulp Fiction, el papel protagonista en Mask, o al padre de Kayleigh en la también genial película de viajes en el tiempo El efecto mariposa, entre otras). Sin embargo, cuando ya llevaban casi media película rodada, vieron que la cosa no funcionaba y la poderosa trinidad formada por Spielberg, Gale, y Zemeckis terminaron insistiendo para poder contar con J.Fox, dando vida al Marty McFly que todos conocemos.

  Por otro lado, Cristopher Lloyd (maravilloso su trabajo en Alguien voló sobre el nido del cuco y en ¿Quien engañó a Roger Rabit?) era muy reacio a hacer este papel… y mira que parece raro, porque difícilmente se puede imaginar a un actor más cualificado para interpretar a “Doc” Emmet Brown (su actuación es simplemente inmejorable y se mete en la piel del personaje desde el primer momento). Al parecer, resulta que este hombre tiene fama de ser más bien serio y no se veía interpretando este personaje, pero al final cambió de opinión y está claro que lo bordó.

  Algo curioso terminó pasando también con el actor pensado para hacer el papel de villano principal: Biff Tannen. Al parecer, el papel estaba pensado inicialmente para el actor que da vida a uno de sus secuaces conocido como SkinHead (Jeffrey Jay Cohen), pero como se supone que Biff debía ser un tipo enorme capaz de intimidar a George y Marty, terminó cayendo el papel sobre Thomas F.Wilson… ¡y resultó ser todo un acierto! . Ya se que prometí centrarme en la primera película de la saga, pero de verdad que me parece impresionante el modo en que este actor lleva a cabo todas las versiones del mismo personaje (joven, adulto, anciano, alternativo, etc), e incluso dar vida al villano de la tercera entrega en el salvaje oeste. En cada ocasión hace un excelente trabajo como malo malísimo y rastrero. Curiosamente, Wilson tiene fama de ser un sujeto encantador, afable, y muy amable con todo el mundo. Es el mismo caso que el actor Tom Felton, que interpretó al engreído Draco Malfoy en la saga cinematográfica de Harry Potter, cuando todo el mundo a su alrededor siempre lo tiene como un sujeto encantador, un ser de luz… y es que ni Wilson ni Felton se parecen en carácter a sus personajes, pero no les impide darles vida de forma excepcional. Eso es ser todo un actor.

  Y si vamos con anécdotas y curiosidades, en esta película podremos encontrar un montón, hasta el punto de que prácticamente podría dedicar un post entero solo a ello, demostrando de nuevo que esta es una película en que los detalles han sido cuidados al máximo y que todo contribuye a formar parte del gran universo de la saga: como el cambio de nombre del centro comercial y la razón de este cambio (esta es para que la pillen los más hábiles), que la máquina del tiempo iba a ser una nevera en lugar de un Delorean en los primeros bocetos del guión… y mejor voy dejando el tema aquí, pero lo cierto es que se podrían mencionar muchísimas más, como el cameo del cantante Huey Lewis (de la banda Huey Lewis and the News) al censurar su propia canción cuando Marty la interpreta en el concurso de bandas del instituto, o que gran parte de los decorados de Hill Valley fueron usados también en la película Gremlins.

  Y ya paro con las curiosidades, lo prometo. Pero puedes creerme si te digo que se queda mucho material en el tintero.

  Volviendo al tema que nos ocupa, el éxito de esta película no es casual en absoluto. Hay un buen equipo técnico y un gran reparto, sí (y eso que no te he hablado del gran trabajo musical de Alan Silvestri al crear el mítico tema de la película ni la genial selección de temas para su BSO). De modo que se aprecia una dirección maestra y un guión que es una joya narrativa por si mismo, lleno de grandes momentos, vale.

  Huey Lewis & The News: Power lf Love.

  Pero eso no es todo.

  También podría destacar la excelente recreación de los años cincuenta en la película. Y es que esta época está fielmente recreada tanto en contexto histórico (recordemos la escena de Ronald Regan), como en ropa, escenografía (fijaos en los carteles de los cines, los autos, y los parquímetros por ejemplo), el modo de hablar de los personajes, y mil detalles más.

  Pero seguiría sin ser todo.

  Toda la película es una sucesión de momentos únicos en dónde todo encaja con perfección milimétrica, y que aún al tratarse de una producción simpática, alegre, y divertida, no faltan los momentos en que a uno se le corta la respiración y llega a dudar por un segundo de que los protagonistas puedan llegar a una feliz conclusión de sus aventuras (ese momento del árbol sobre el cable en la torre del reloj se me puso la misma cara que a Doc). Eso por no mencionar el excelente equilibrio entre aventura, acción, y comedia, incluyendo gran cantidad de referencias temporales para disfrute del espectador (como esta magistral secuencia en que Marty toca el mítico tema de Jhonny Be Good, sirviendo de inspiración al legendario guitarrista Chuck Berry para crear su estilo). Y pese a dejar la sensación de que todo ha quedado bien resuelto, logra aprovechar ciertos elementos como material para sus brillantes secuelas.

 Vamos, una película que sigue siendo perfectamente disfrutable a día de hoy, un clásico de la ciéncia-ficción que te deja fantaseando en las posibilidades que ofrecería meterse en la piel de los personajes y los peligros de viajar en el tiempo, mientras se goza de cada segundo de metraje. ¿He dicho ya que es una mis favoritas y que la habré visto como chorrocientas veces?

  Buena prueba de la estupenda salud de la que goza esta cinta, es la gran cantidad de solicitado merchandising que existe al respecto que incluye posters, camisetas, una serie animada, reproducciones del Delorean en Lego y Playmobil, cómics, gorras, ediciones especiales en DVD o Blue-Ray… y por supuesto videojuegos a saco. En los ochenta y noventa vimos varios títulos inspirados en esta saga para nuestras Mega Drive y Super Nintendo, pero es que en 2010 apareció un juego desarrollado por la tristemente desaparecida TellTale que pretendía ser la continuación de la saga cinematográfica en forma de juego point-&-click. Personalmente no lo he jugado y soy de la opinión de que no debería hacerse una continuación de la franquicia bajo ningún concepto… pero confieso que resulta tentador echarle una partida.

  En conclusión. Para Michael J.Fox y Cristopher Lloyd habrá pasado el tiempo, pero Marty McFly y el doctor Emmet Brown siguen en plena forma. No puedes imaginar como lo he gozado volviendo a ver esta gran película como preparación para escribir este post, y ya te digo ahora que no creo que tarde mucho en volver a ver las secuelas.

  Sin duda alguna se encuentra en mi top de películas favoritas de todos los tiempos, por lo que si nunca la has visto, no puedo hacer de menos que recomendarte esta joya del género. Y si ya la viste en su momento, te animo a que la vuelvas a ver, pues apuesto a que le encuentras algún detalle que se te escapó la primera vez y que la disfrutarás en grande de nuevo. ¡Anda que no!

  Como recomendación de la semana, os traigo una nueva sugerencia del amigo Raziel del blog  mundoanimecritico.blogspot.com/ (gracias por la idea compa).

  Se trata de la tienda Shogun Salamanca. Yo personalmente no he estado ahí (aún), pero ha sido darme una vuelta por su impresionante página web, y desear el dejarme caer por ahí, porque en verdad que tienen material de ese bueno bueno bueno. No solo hay todo tipo de cómic (norteamericano, europeo, nacional, y manga) y un amplio surtido de objetos de coleccionista de lo más interesantes (desde funcos, figuras de acción, calendarios, reproducciones de objetos de película y demás), sino que también hay una amplia variedad de juegos de mesa y juegos de rol de todo tipo. Vamos, que me he quedado encantado con la tienda y seguramente le termine haciendo algún encarguillo online y que me lo traigan a casa. Si quieres juzgar por ti mismo, o buscas algo en concreto, te dejo un link directo a su web para que le eches un vistazo.

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  ¿Y tú?

  ¿Aún no te he mencionado nunca en la “recomendación de la semana”?

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  Sin más que añadir, cuídate mucho y pásalo bien.

  Salud, ánimo, y éxito.