Cultura Retro: Los libros de «Elige tu propia aventura»

  Si has nacido en los años 70, 80, o incluso a principios de los noventa, es muy probable, por no decir casi seguro, de que has “jugado” algo que implica elegir un libro previamente preparado para esta finalidad, tomar el control de un protagonista que viva la aventura que se está narrando, y tomar las decisiones que tomemos oportunas para que el personaje que “manejamos” pueda llevar sus andanzas a buen término.

  Todo lo que tuviste que hacer, era leer un libro diseñado de forma muy especial, un libro cuyas páginas no leíste jamás en orden. Un libro-juego.

  En esta ocasión, me estoy refiriendo a los libros originales de “Elige tu propia aventura” que casi todos conocimos en nuestros colegios cursando la primaria, y que vinieron a España gracias a la editorial Timún Mas, cuya portadas rojas (o azules si eran en catalán) decoraba las estanterías de nuestras aulas, y que fueron creados por el abogado neoyorquino Edward Packard, el cual tenía la costumbre de inventar cuentos que leer todas las noches a sus hijas, hasta que un buen día las dos niñas no estuvieron de acuerdo con el final de uno de estos cuentos, y este buen señor decidió crear una historia con dos finales distintos que elegirían ellas mismas.

  Había nacido una idea que vendería cientos de millones de ejemplares en todo el mundo, y con razón.

  Estos libros ya sorprendían de entrada por estar escritos en segunda persona y dirigirse a ti directamente como protagonista indiscutible de la aventura que se desarrolla en sus páginas. Y no solo eso, sino que su principal atractivo se basaba en que eras tu quien debía elegir entre distintas acciones para superar las situaciones o peligros que afrontaba el “tu-protagonista” de estos libros.

  Me explicaré.

  Cada uno de estos libros trataba sobre una situación de fantasía o ciencia-ficción que estaba bien clara en el título y en la portada, como encontrar una lámpara mágica, adentrarte en un mundo de espada y brujería, trabajar como espía, cazar fantasmas, domar caballos salvajes, y así un largo etcétera que abarcaba casi cien títulos, cumpliéndose así la premisa principal de los libros al elegir realmente tu propia aventura por el simple hecho de seleccionar un libro u otro. Tras unas páginas introductorias, se te ponía frente a frente con una situación adversa y para superarla debías tomar una decisión que te hacía ir a una página u otra del libro según lo que eligieras que hiciera el «tu-protagonista”. Para que os podáis hacer una idea, os dejo un ejemplo sacado del primer libro de la colección “Elige tu propia aventura”, llamado “La cueva del tiempo”:

  Al penetrar en la cueva percibes una luz oscilante y olor a humo. Caminas a lo largo de un tortuoso pasadizo hasta llegar a una amplia cámara. El humo procede de unas vasijas de barro.

  Unos hombres bajos y robustos, con pelo negro, muy lacio y rasgos primitivos, están ocupados pintando sobre las paredes de la cueva. Visten con pieles de animales. Observas que en un rincón hay varios lechos de paja.

  Te quedas paralizado por el miedo cuando los habitantes de la cueva abandonan su trabajo para correr hacía ti con expresión de asombro. El mas alto lleva en sus manos una larga liana, se adelante como si tuviera intención de agarrarte y atarte con ella.

  Si te quedas y tratas de entablar amistad, pasa a la página 26.

  Si tratas de escapar, pasa a la página 28.

  A continuación te dirigías a la página de la opción que elegías para seguir leyendo y avanzar en la historia hasta que de repente debías elegir entre varias opciones de nuevo. Y así hasta que llegabas a un final que dependía de las decisiones que habías tomado. Dichos finales se encuadraban dentro de las cuatro categorías siguientes y solía haber varios de cada clase en cada libro:

  –Final feliz. No solo lograbas una gran victoria, sino que llegar a él casi siempre significaba que habías resuelto el misterio principal de la historia. Normalmente también era el que te hacía pasar por mayor número de decisiones para alcanzarlo.

  –Conclusión simplemente satisfactoria. Algo del tipo “al menos has sobrevivido y las cosas no están peor”. Lo cual casi siempre te llevaba al punto de inicio sin mayores consecuencias.

  -Darte de bruces con resultado desagradable (fracasaste en tu empeño, te han detenido, estás herido y no puedes continuar, la vida de tu personaje no volverá a ser igual, etcétera).

  -O incluso podías encontrarte con un final negativo en que tu personaje no solo fracasaba irremediablemente en su propósito, sino que era a veces podía llegar a morir. A modo de ejemplo, expongo un final que logré realmente con uno de estos geniales libros, y que me impactó mucho por lo crudo y original del mismo, pues un dragón con poderes mágicos engañaba a mi personaje y lo convertía en un pequeño pájaro al que terminaba devorando al intentar escapar volando. En estos finales también era frecuente terminar esclavizado, hecho prisionero, o algún otro desastre parecido.

  Y este precisamente era uno de los puntos fuertes que tenían estos libros. Al estar hecho con una estructura ramificada con tantas opciones y finales distintos, podías “rejugarlos” un gran número de veces, empezando a leer desde el principio y tomar decisiones distintas que te llevaban a nuevas situaciones y peligros con la posibilidad de llegar a un final diferente. De modo que era como tener muchas historias en un solo volumen.

  Esta sencilla fórmula llegó a tener tanto éxito que con el tiempo se crearon más colecciones enteras de diversa índole que explotaban el mismo método. Incluso algunas marcas y personajes ya conocidos decidieron subirse al carro y probar este mecanismo.

  Entre ellos encontramos algunos ejemplos interesantes, como una colección destinada a niños de entre 7 y 9 años llamada “El globo azul”, algunos libros de la colección “Pesadillas” (o “Goosebumps”), títulos basados en las aventuras de personajes conocidos como “El joven Indiana Jones” o “Sherlock Holmes”, cómics de Marvel dónde tomabas el papel de un popular súper héroe… hasta el dibujante Juan López Fernández “Jan” puso a su conocida creación “Superlópez” en un cómic creado con este formato con clara intención de parodiar su propia obra. De este original volumen recuerdo con una sonrisa que si tomabas la elección “Haz que Superlópez trate de vender un detergente al lector”, el héroe introducía al villano conocido como “el inquietante profesor Escariano Avieso” en una lavadora con un jabón quitamanchas tan potente, que el malvado científico se hacía bueno.

Incluso Netflix intentó este modo de contar una historia a través de su título Bandersnatch, en dónde el espectador tomaba la decisión con el mando a distancia en esta película interactiva. 

Y esto son solo algunos ejemplos, pues se produjeron muchas colecciones más de libro-juegos con este formato. Cómo siempre, si queréis profundizar más sobre el tema, os animo a buscar por vuestra cuenta.

  Y aunque en retrospectiva, uno se da cuenta fácilmente de que las decisiones más prudentes, bondadosas, y que requerían el sigilo o la astucia por encima de la fuerza bruta eran las que tenían mayor posibilidad de llevarnos a uno de los mejores finales, también es fácil darse cuenta de lo maravilloso que era eso, pues sin darnos cuenta, estos libros también nos servían como complemento en el aprendizaje de valores y que toda acción tiene sus consecuencias.

  No sé si estos libros se siguen usando en las escuelas, pero si no es así, por favor que vuelvan.

  ¿Y tú que opinas al respecto? ¿leíste alguno de estos libros? Ya sabes que siempre que sea desde el respecto a los demás usuarios, puedes compartir tu opinión o tus vivencias en la caja de comentarios.

  No me despido sin antes recordaros que, si estás cerca de Sabadell, del 9 al 15 de este mes de marzo se realiza el IX Festival de cine de terror de Sabadell. sabadellfilmfestival.com/es/

  Hasta la próxima, que será el día 15 de marzo.

  Sed felices y pasadlo bien.

Comments

  1. Me encantaron esos libros! y sus versiones. Hasta creo que los juegos de rol le deben un poco de su posterior popularización a esta forma de narrar. Se abre un mundo de posibilidades para los inconformistas que deseamos no quedarnos con la visión del autor. Cada cosa en su formato. Es complejo de diseñar pero vale la pena. El intento de Netflix con Bandersnatch me gusto aunque la historia fue floja, ojalá no abandonen la fórmula de historia abierta en Black Mirror y perfeccionen esa nueva forma de jugar. Yo misma lo estoy intentando en el blog. Una especie de blog-juego con Juegos de historias. Es difícil pero a ver como me sale. De momento llevo 3 finales y una madeja de enlaces jejejeje ya te contaré 🐾

    1. Hola rosaboschetti, encantado de saludarte y gracias por tu comentario, el cual me ha encantado. Lo cierto es que estuve a punto de comentar que realmente estos libros no se difieren mucho de un juego de rol, tanto por su mecánica como por su forma de narrar, y me parece genial que alguien más lo piense. En cuanto a Bandersnatch de Netflix, coincido contigo en que la trama podía haberse pulido un poco más, pero que su mecánica es muy interesante. ¿Cuál es la dirección de tu blog?, me parece sencillamente genial que estés adaptando este modo de contar una historia así como el término de «blog-juego». Te deseo toda la suerte del mundo y te agradecería que cuando lo tengas terminado me avises para echarle un vistazo y compartirlo en «tallopis-escribe.com«. Un abrazo 😀

  2. Hola T.A.Llopis la dirección de mi blog es
    rosaboschetti.wordpress.com/2020/02/02/detras-del-retraso-en-juego-de-historias/ pero la dirección de Juego de historias, como tal, la tendré publicada el día 17 de este mes. De momento estoy con las últimas correcciones de texto e ilustraciones (Me tardé más de lo previsto ya que en el calor del montaje terminé haciendo más de 100 ilustraciones, como explico en el enlace que te dejo.) Estoy muy emocionada con este proyecto, espero que cuando alguien lo lea se divierta tanto como yo al hacerlo. Gracias por tu interés. Un abrazo 🐾

    1. Hola rosaboschetti, encantado de saludarte de nuevo y gracias por tu link. Ten por seguro que vendré a echarle un vistazo porque ya te digo que tu proyecto me parece muy interesante, más aún sabiendo que te lo estás currando tanto y que las ilustraciones son tuyas. Te deseo todo el ánimo y éxito en tu proyecto. Un abrazo.

Tus comentarios son más que bienvenidos.