Cine de los 80: El joven Sherlock Holmes y el secreto de la pirámide

  Londres, año 1870.

  El acaudalado administrador Bentley Bobster sale de su despacho y se introduce confiado en las calles de la ciudad. Es de noche, nieva, pero ello no impide que la actividad de la gran ciudad siga adelante. Vendedores de castañas anuncian su mercancía como medio de combatir el frio, se oye el traqueteo de los carruajes y las voces de los transeúntes en sus quehaceres habituales. Entre todo el gentío, una figura encapuchada pasa desapercibida mientras persigue a Bobster, que se encuentra distraido y relamiéndose al ver el menú en su restaurante preferido. Sin que nadie se dé cuenta, sutilmente, el encapuchado usa una extraña cerbatana para lanzar un misterioso dardo en el grueso cuello del administrador, causándole una horrible alucinación que le hace salir corriendo del establecimiento, presa del pánico. Aun con su corpulencia, no para de correr hasta llegar a su domicilio, sube las escaleras a toda prisa, deja caer el pesado abrigo de cualquier modo para sorpresa de su criada, y cierra apresuradamente la puerta con llave desde dentro.

  Solo ha sido una alucinación, se dice mientras se lava la cara y observa su propio reflejo en el espejo del lavamanos. Una mala pasada que le jugó la mente. Pero ya está, ya pasó.

  Todo va bien.

  La lampara de la percha empieza a rugir como una bestia de pesadilla mientras explota violentamente, lanzando llamaradas en todas direcciones. Sobre la cama, en las cortinas, sobre la alfombra. Toda la estancia empieza a arder intensamente. Para Bobster el incendio es tan real que teme por su vida, y desesperado salta por la ventana para intentar salvarse.

  No sobrevive a la caída.

  La sombra del misterioso encapuchado se proyecta sobre el cadáver inerte de Bobster y se pierde calle abajo con un extraño tintineo.

  Empiezan los créditos de entrada.

  Así es como empieza El secreto de la pirámide, o Young Sherlock Holmes en su versión original. Esta película fue estrenada en 1985, y dirigida por Barry Levinson con guion de Chris Columbus. Dicha producción se permite la licencia de teorizar sobre qué habría ocurrido si Sherlock Holmes y el doctor John Watson no se hubieran conocido de adultos como está establecido en las novelas, sino en sus años mozos, como alumnos internados en uno de estos colegios ingleses de rancio abolengo que acongojan y dan ganas de salir corriendo solo con ver la fachada.

  Obviamente no vi la película en su estreno (pues en el 85 yo era un renacuajo que apenas si tenía cuatro añitos), pero todas las veces que la he visto, incluyendo otro visionado reciente para preparar esta entrada, siempre he aplaudido mucho el trabajo de esta película. Pues se trata de una producción tremendamente respetuosa con el material original, lo cual no solo se nota con el texto que se muestra al inicio y al término de la película, en los cuales se reitera que esta película es solo una obra especulativa que solo teoriza y se permite ciertas licencias, ni con el hecho de que Dame Jean Conan Doyle (descendiente directa del autor que creó los personajes) diera el visto bueno a la misma, sino por el modo en que se plasma el buen hacer de Columbus con la trama y el guion. Se nota que se ha empapado bien de las historias del célebre personaje para documentarse, y lejos de ser una hipotética precuela que simplemente nos muestra el personaje adulto en versión joven y exactamente igual a como narran los libros, esta película es más del tipo “nacimiento del héroe”, pues en ella se nos presenta un adolescente Holmes que apenas empieza a mostrar sus capacidades deductivas, que es abierto, jovial, cercano, amistoso, y que incluso muestra un interés amoroso así como su deseo de “no querer vivir solo” (siempre me ha impactado mucho esta escena). Y es que este título nos ofrece una serie de acontecimientos ficticios que aportan una idea interesante a como se podría haber formado el personaje principal, como pudo conseguir algunos de sus elementos característicos, desarrollar su carácter y personalidad que conocemos de sus aventuras en la madurez, así como una larga lista de razones por las cuales el personaje literario pudo haber terminado siendo como es y lo que es en la obra de Arthur Conan Doyle. Y no solo lo hace tomando a los libros como referencia en todo momento, sino con una trama más que entretenida. Pues además de todo esto se encuentra el emocionante misterio en que Watson (Alan Cox), Holmes (Nicholas Rowe), y su amada Elizabeth (Sophie Ward) se verán envueltos con riesgo de sus vidas.

Como podréis suponer, la escena que os comento al principio solo es la punta del iceberg en este hipotético primer caso para el mejor detective de la literatura, que implica toda una serie de giros, secretos, y personajes implicados en una trama que involucra desde ritos ancestrales vinculados a la cultura egipcia, hasta secuestros, un culto prohibido, y un complot de múltiples asesinatos llevados a cabo por una mano invisible, oscura y siniestra que marcará fuertemente a los tres personajes. Toda la historia está muy bien llevada, especialmente porque no es la típica situación en que los protagonistas se lanzan a la aventura porque son los héroes y no hay nada mejor que hacer que resolver dicho misterio por nobleza y ganas de vivir una aventura sin más ni más, sino que las circunstancias del caso les atañen directamente por múltiples razones, enlazando sus propios intereses personales con el misterio entorno al cual gira la cinta.

  Lo cierto es que durante este nuevo visionado me lo he pasado en grande, y personalmente no me parece que sea una película que haya envejecido mal. Y eso que fue una película pionera en dos conceptos, al menos que yo sepa.

  Uno de ellos, es que se trata de la primera producción en que se usaron efectos CGI fotorealistas. Esto se produce en la escena del caballero de la vitrina, y si bien en comparación aquí se nota que a día de hoy se ha avanzado mucho en este campo, lo cierto es que sigue cumpliendo perfectamente su propósito y la escena queda muy bien plasmada a efectos de esta película. Es una secuencia digna de ser apreciada, en dónde el trabajo computerizado demuestra haber sido tratado con mimo y detalle para lo que era en aquel momento.

  La segunda, es que esta película es de las primeras que yo conocí con escena post créditos al final. Son apenas unos segundos, pero es escuchar ESA voz y leer ESE nombre, y uno se da cuenta realmente de la magnitud que pretende tener esta película en lo que se refiere a tener relevancia para los protagonistas, aunque sea una película que simplemente especule con una hipótesis distinta a los libros. Es sencillamente brillante.

  Por si esto fuera poco, al verla de nuevo no he podido evitar pensar en distintos momentos como es de evidente que Steven Spielberg y Cris Columbus están implicados. Pues no pocas escenas me han recordado a otras muy parecidas de Indiana Jones y el templo maldito, así como numerosas similitudes con las dos primeras películas de Harry Potter.

  En resumen, que me lo he pasado en grande volviendo a verla, pues aunque no podamos decir que se trate de un peliculón en toda regla, sí que es de estos títulos que es agradable volver a ver y que se deja disfrutar. Ideal para una sesión de cine nostálgica.

  Y hasta aquí llega esta entrada.

  Como recomendación de esta semana, os dejo una web que contiene un listado de Scape Rooms virtuales a las que podéis jugar desde casa, ya sea solos o haciendo un grupo. He probado varios de ellos, y no solo son gratuitos, sino que son más que entretenidos. En la mayoría de ocasiones solo tenéis que entrar en la web y el juego ya comienza casi de inmediato, mientras que en otras es necesario suscribirse. Ideal si después de leer esta entrada os sentís detectives y tenéis ganas de poneros a prueba.

www.elnacional.cat/es/cultura/escape-rooms-online_490821_102.html

  Si todo va bien, volvemos a vernos con más contenido el día 19 de abril, es decir, el domingo que viene. Si te ha gustado la entrada no te olvides darle a Me gusta, compartir, dejar un comentario, o si lo deseas, contribuir voluntariamente con un café a mantener el blog.

  Cuídate mucho y pásalo bien.

  Ánimo y éxito.

Comments

  1. Yo tampoco la vi en su estreno, pero después la he visto más de una vez (y más de dos). Hace bastantes años de ello y me está entrando «ganeta» de volver a verla después de leer el post.
    Voy a dar una vuelta por la web de Scape Rooms que recomiendas que en estos días viene bien mantener la cabeza ocupada

    1. Hola, muchas gracias por tu comentario. La verdad es que se trata de una película que es agradable de volver a ver y en cada nuevo visionado te sorprende con algo nuevo. Me alegra que este post te sirva para reencontrarte con esta producción, espero que disfrutes mucho de de reencontrarte con el joven Holmes y compañía. Y la web de Scape rooms, la verdad es que tiene algunas de muy interesantes. Un abrazo.

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