Muchos estaréis de acuerdo en que, incluso con lo bien que lo pasábamos con nuestros compañeros y lo mucho que disfrutábamos en la hora del patio cambiando cromos y jugando al fútbol entre otras cosas, la última hora de clase por la tarde era la más difícil de llevar por las ganas que teníamos de salir y marcharnos corriendo a casa.
Y salvo que tuvieras alguna actividad extraescolar, o algún otro compromiso al terminar las lecciones, una de las mejores cosas que se podían hacer al llegar a casa una vez habíamos merendado y terminado los deberes, era quedar en la calle con los amigos para jugar o bien ver los dibujos animados que daban por las tardes, pues a principios de los 90 era común que cadenas públicas como Antena 3 (con el programa “La Merienda” de Miliki y Rita Irasema primero, o con Ana Y Raquel tiempo después) y Telecinco (con la mítica serie de “Oliver y Benji” o “SuperGol” del personaje de Rafael como protagonista) dieran series de animación en algún punto entre que llegábamos a casa tras el colegio y la hora de cenar, pero por regla general eran las cadenas autonómicas quienes se llevaban el gato al agua y nos tenían entusiasmados con las series que nos ofrecían.
De entre todas las que emitían, una de mis favoritas era sin duda Doctor Slump, o Dr.Suranpu en su versión original. Un anime basado en el manga japonés del mismo nombre que se empezó a publicar en la revista Shonen Jump en enero de 1981 y que había sido creado por un autor casi desconocido y con pocos trabajos en su haber, un joven llamado Akira Toriyama.
El manga tuvo un éxito arrollador, llegando rápidamente a gozar de una inmensa popularidad en su país de origen, por lo que se tardó muy poco (apenas cuatro meses, lo cual es algo nada frecuente) en aprobarse la idea de lanzar un anime para televisión. De este modo, el 8 de abril de 1981 se emitió en tierras niponas el primer capítulo de esta serie de animación, la cual no tardó en convertirse en todo un acontecimiento que casi alcanza los 250 capítulos hasta su finalización en 1986. Y su éxito no es de extrañar, pues su impactante originalidad y sentido del humor tan característico dejaba atrás las típicas series infantiles para ofrecer unas situaciones tan novedosas como delirantes en dónde se mezclaba la fantasía, la ciencia ficción, y la cultura japonesa con la parodia más desternillante.
Para muestra, no hay más que echar un vistazo a la trama de la serie, que nos pone como escenario una ficticia isla japonesa de terreno montañoso y clima ocasionalmente tropical, llamada Gengoro, y cuya única población resulta ser Villa Pingüino (supongo que recibe este nombre por que el alcalde es un pingüino que constantemente se queja del calor). En dicho lugar, sus peculiares habitantes viven todo tipo de extrañas aventuras. Lo cual no es de extrañar, pues si el alcalde es un pingüino, imagina que ocurre cuando humanos y animales antropomórficos de todo tipo conviven a diario con demonios, extraterrestres, ancianas siniestras, peluqueros con la cara de Clint Eastwood, fantasmas, cacas bailarinas, y súper héroes de pega entre otros sorprendentes individuos. Y entre todos estos sorprendentes personajes, encontramos que uno de los principales protagonistas es un brillante científico e inventor llamado Sembei Norimaki, el cual decide construir una máquina para que le ayude con las tareas de la casa. El resultado de su trabajo es un robot de alta tecnología a la que pone el nombre de Arale y a la que otorga un aspecto permanente de niña pequeña de carácter infantil, atolondrado e inocente. La situación no iría mucho más lejos si no fuera porque Arale resulta ser prácticamente indestructible, capaz de lanzar misiles, realizar cálculos avanzados, correr a velocidades supersónicas mientras emite su característico grito “IIIIIiiiiiiiiiiiiiiiiiiiinhhhh”, y tener una fuerza ilimitada que le permite romper la Tierra por la mitad de un solo puñetazo, con lo cual Sembei lo tiene muy difícil para guardar el secreto sobre el origen de Arale y convencer a todos de que es su hermana pequeña y no un robot.
Por si esto fuera poco, los dos mejores amigos de Arale son una especie de angelito con forma de adorable bebé volador llamado Gatchan, el cual se alimenta de metal y dispara rayos eléctricos desde sus antenas. Y por otro lado está la gamberra adolescente Akane, que solo vive para gastar bromas a los demás habitantes del pueblo y pasar el rato con el resto de la pandilla: los hermanos Soramame, el macarrilla Taro y el llorón Pisuke.
Como podéis imaginar, semejante mezcla de factores resulta ser una receta infalible para vivir situaciones cómicas con los ya particulares personajes que pueblan la serie. Pues a todo esto aún quedan por añadir los demás inventos de Sembei, que incluyen aparatos tan increíbles como las gafas que solo ven materia orgánica, un coche que funciona con cuerda, la pistola del rayo grandipequeño (para cambiar el tamaño de los objetos a voluntad), la máquina de resbalar en el tiempo, el rayo transformador ponpocopon (que convierte cualquier cosa en cualquier cosa), o la máquina de la realidad, que en realidad es una arrocera que convierte las fotografías en objetos reales si se le añade agua hirviendo, entre otros muchos.
Y ya la cereza sobre el pastel, es la habitual aparición de mafiosos, bandidos, invasores del espacio, monstruos gigantescos (como Godzilla y Gamera entre otros), fashion victims de tres años en triciclo, vampiros que actúan como heraldos de la muerte, el hijo del Diablo, y hasta un villano recurrente en la serie, que envidia al doctor Norimaki y cuyo mayor deseo es derrotar a Arale con sus robots hombres de caramelo para así poder conquistar la tierra. Me refiero al malvado doctor Mashirito, cuyo nombre se obtiene de invertir el orden de las sílabas (o caracteres japoneses) que forman el apellido del señor Torishima, editor de Akira Toriyama, autor de la serie y personaje recurrente de la misma que aparece representado como un robot, o un señor con gafas oscuras y máscara de cirujano que organiza eventos para los protagonistas, como carreras, concursos, y demás.
Todo junto formaba un conjunto de situaciones realmente divertidas a las que se añadían algunos gags basados en que algunos personajes eran unos pervertidos de cuidado, dándole un ligero toque de humor verde a la serie que resultaba sorprendente por su clasificación “Mayores de diez años” en horario infantil, y que casi seguro que hoy serían inemitibles. También eran muy frecuentes las roturas de la cuarta pared en que los protagonistas se dirigían directamente a los espectadores, o cuando los propios diálogos hacían referencia a su condición de personajes ficticios con momentos realmente brillantes como:
“- ¡Dios mío, no tienes agujeros en la nariz!
-Ni tu tampoco, que esto son unos dibujos animados.”
Con todo esto, y más que me dejo en el tintero para no alargarme, es fácil comprender porque los diálogos y estilo de dibujo de la serie convirtieron a “Dr.Slump” en un producto de gran éxito en muy poco tiempo y cuya popularidad aún sigue hoy en día pese a que ya han pasado 34 años desde que se dejó de emitir, y que su manga original llegó también al final tras 18 tomos.
En 1993 se retomaron de nuevo tanto el anime como del manga, pero Toriyama no formó parte del proyecto como dibujante ni guionista. En este retorno, el manga fue obra de Katsuyoshi Nakatsuru y con guion de Takao Koyama para la publicación V Jump hasta setiembre de 1996. Mientras que el remake del anime solo tuvo 74 episodios y se emitió desde el 26 de noviembre de 1997 hasta su cancelación el 22 de setiembre de 1999, con un estilo de animación más avanzado y una Arale que había cambiado su característico pelo color morado por una melena de color castaño entre otros muchos cambios que se produjeron con respecto al material original, y que personalmente no me terminaron de convencer. Puede que sea por el factor nostalgia o que personalmente los guiones me parecieron mucho más suaves e inocentes, pero lo cierto es que no lo disfruté tanto como el que vi en los 90.
En fin, siempre nos quedará la Ultimate Edition del manga, del cual llegué a tener toda la colección de trece tomos y puedo deciros que no esta nada, pero que nada mal (siempre me arrepentí de haberla vendido). También podría liarme a ver si encuentro alguna de las 11 películas que se llegaron a crear sobre estos divertidos personajes (de la primera a la quinta se hicieron en los años 80, de la 6 hasta la 10 en los 90, y la última de ellas vio la luz en el 2007).
La verdad es que me encantaba esta serie, y la recuerdo con mucho cariño, especialmente por la de risas que me llegué a dar cuando la vi por primera vez durante mi infancia, por la emoción con que comentábamos el capítulo anterior al día siguiente en el recreo, y por cómo nos divertíamos al repetir las expresiones Hoyoyó o N’cha tan características de la entrañable Arale.
Otro día si eso, ya hablaremos de los distintos crossover entre este manga y el otro gran peso pesado de Akira Toriyama: Dragon Ball. Solo deciros al respecto que en su momento a más de uno nos explotó la cabeza al saber que Villa Pingüino comparte universo con Namek y la Capsule Corp entre otros escenarios míticos de las aventuras de Son Goku y compañía.
Y hablando de explotar cabezas, investigando para esta entrada encontré lo siguiente. ¿Qué opinión te merecen estas declaraciones del propio Toriyama? (suponiendo que no sea un fake):
Hasta aquí llega la entrada de esta semana. Normalmente me gusta dedicar estas últimas líneas a recomendaros algún próximo evento interesante que esté relacionado con la cultura friki o geek, pero al estar todo cancelado y cerrado por la recomendación sanitaria del coronavirus, me temo que no puedo recomendaros de ir a ninguna parte (haced caso de las recomendaciones sanitarias y quedaros en casa, en serio). Sin embargo, (y gracias al buen hacer de Gendou el Neoretrogamer y su blog retroorama.blogspot.com), puedo dejaros esta lista de juegos gratuitos en gog.com para que la cuarentena se os haga más llevadera.
www.gog.com/games?page=1&sort=popularity&price=free
Y eso es todo por mi parte. Nos volvemos a ver el día 22 de este mes, hasta entonces, pasadlo lo mejor posible.
Ánimo y éxito.
¡Qué buenos recuerdos me ha traído este post! :_) Aquí siempre nos referíamos a la serie como Arale y la verdad que a día de hoy, y como bien indicas, raro sería que la clasificasen con una edad recomendada de 10 años XD A este anime le pasa un poco como a Shin Chan, lo ponían en horario infantil pero tenía muchos dobles sentidos que un niño no llegaba a entender.
En la época recuerdo haber visto también los mangas en el quiosco, pero como no me daba el dinero para todo, tenía que elegir entre Dr. Slump o Dragon Ball, y siempre me iba al segundo xD
Por otro lado y por si no lo sabías (que seguramente sí) es un personaje jugable en el juego de PS2 Dragon Ball Z Budokai Tenkaichi 3.
Estupenda entrada como siempre! Un saludo 😀
¡¡Hola Suso :D!!
Compa, eres más que bienvenido, muchísimas gracias por tu genial comentario 😀
Desde luego, como han cambiado los contenidos de animación con el tiempo XDXD. Recuerdo estas escenas en que podíamos ver a Sembei Norimaki o al señor Tun con revistas porno, entre otro contenido bastante «chocante», como una niña jugando con cacas. De verdad que hoy en día esto sería inemitible en televisión, y más en horario infantil. Pero por otra parte… ¡cómo nos reíamos con esta serie! Para mi era de mis favoritas, y me encanta que me digas que la llamarais «Arale» a secas, pues en Menorca hacíamos lo mismo :D. Por cierto, vaya otro Shin Chan, la verdad es que el tema que has puesto sobre la mesa da mucho de sí :).
Por cierto. Entiendo que es una decisión difícil, ¿Dr.Slump o Dragon Ball? (especialmente cuando Goku todavía era pequeño). Porque lo cierto es que los inicios de esta mítica saga también fueron todo un boom que pegó realmente fuerte :D.
En cuanto a este detalle que comentas sobre el videojuego Dragon Ball Z Budokai Tenkaichi 3, debo decirte que no, no lo sabía y me has sorprendido de veras con esta información :O. Tan pronto he leído tu comentario he ido corriendo a buscar alguna imagen para satisfacer mi curiosidad y verlo con mis propios ojos, y he flipado, de modo que gracias a ti he aprendido algo nuevo y te lo agradezco con toda el alma :D. Por otro lado, si sabía que Arale y Gatchan aparecen como personajes de refuerzo en el videojuego J-Stars Victory VS, junto a otros increíbles personajes de corte más humorístico como el hilarante agente de policía Kankichi Ryotsu de Kochikame.
Un abrazo bien grande compa ^_^
La verdad que tienes toda la razón, a día de hoy todo ese anime o series que veíamos en su día sería impensable que volvieran a emitirlas en horario infantil. Pero oye, que «nos quiten lo visionado». Tampoco hemos salido tan mal ¿no? XD
Aquí en Barcelona se le llamaba Arale también, aunque si no recuerdo mal en el opening decían «Dr. Slump» Pero claro, la canción empezaba con «Ja està aquí ja arriba l’Arale…» y con Arale se quedó XD
La decisión en mi caso es algo más sencilla. Dragon Ball, sin hacer de menos a Dr. Slump, Dragon Ball fue mi primer anime, he sido un fanático de la serie toda mi vida y como anécdota curiosa, te diré que viendo Dragon Ball, aprendí catalán (soy de Madrid pero me vine de pequeño a Barcelona y aquí sigo 30 años después). Aquí en Cataluña Dragon Ball fue un bombazo, íbamos todos locos con las aventuras de Goku, y cuando empezaron a emitir Z, nos voló la cabeza. Solo te digo, que conservo cromos, cartas y los juguetes de Bandai de la época. Incluso un Gogeta que te montabas tu mismo y que conseguí en Andorra. Y paro ya que me está entrando la nostalgia XD
Arale en Tenkaichi 3 era un personajón, bastante poderosa y con ataques muy divertidos. Lo que no sabía era que había aparecido en otros videojuegos.
La verdad que es un placer pasar por aquí, es un nido de nostalgia para los que vivimos la época y sorprendes con cada entrada. De veras que me encanta tu blog!
Un abrazo enorme!!
¡¡Hola Suso :D! Como siempre, un verdadero placer verte de nuevo por aquí, y más al leer tu genial comentario sobre el post dedicado a esta serie, a la que le tengo tanto cariño.
En cuanto a lo que comentas, tengo que decir que estoy totalmente de acuerdo con lo que comentas: Hoy en día esta serie sería totalmente inemitible actualmente, tanto por estos momentos un tanto picantes que tenía en ocasiones, así como otras situaciones delicadas que vemos habitualmente en la serie, como ver a Arale jugando con ¿cacas bailarinas? O_o. De echo, no se si será que ya me estoy haciendo viejo (XDXD), pero de verdad que a veces alucino de las cosas que a veces veíamos en televisión en horario infantil en aquellos tiempos, como el personaje de Patricia en Lupin III o Bulma en la primera serie de Dragon Ball. Y ya no hablemos de series como Ren y Stimpy O_o. Pero como bien dices, no salimos nada mal, a lo que añadiría que nos reímos un montón gracias a estas series. Por otro lado, a veces también tengo la sensación de que hoy por hoy hay demasiada gente rasgándose las vestiduras con suma facilidad por temas que no son para tanto… pero ya me estoy liando de nuevo ^_^, y esta es otra historia.
¡¡¡¡¡¡¡¡No fotis que vius a Barcelona 😀 !!!!!!!!!!!! Jajajaja, que fuerte :D. Como ya he comentado alguna vez, soy de Menorca, pero hace años que vivo en Barcelona ciudad. Y ni que decir que también conocí esta serie en catalán, por lo que tengo muy presente esta intro que comentas. Aunque fuera llamada «Dr.Slump», para mi también era la serie de «Arale» (que grande el doblaje de Senbei Norimaki, me encantaba XDXD).
Bueno, bueno, bueno. Realmente, de estos primeros trabajos del gran Akira Toriyama (Dragon Ball y Dr.Slump), es lógico que cada uno se decante más por uno o por otro, pero cada una a su manera, no se puede negar de que se trata de grandes historias muy divertidas llenas de geniales personajes. Si te soy sincero, soy un grandísimo fan de Arale y sus aventuras, ¿pero como no seguir a Goku y compañía en estas grandiosas aventuras para encontrar las «7 boles de drac»? Simplemente maravilloso. Toriyama me parece un verdadero genio (¿has visto como algunos videojuegos como Chrono Trigger o Dragon Quest usan personajes basados en su estilo de dibujo?, simplemente maravilloso). Ya puedes bien guardar estos cromos, cartas, y juguetes de la mítica Bandai, porque esto son auténticos tesorazos. ¿No tendrás por casualidad una foto de este Gogeta que me puedas mostrar por Twitter? 😀 Me encantaría verlo. De hecho, me encanta que me expliquéis este tipo de historias 🙂
Ostras, pues no sabía que Arale fuera un personaje presente en Tenkaichi 3 :O. Estaba al corriente de su aparición en J-Stars Vs como personaje de apoyo junto a personajes como KochiKame :O. ¡¡Muchísimas gracias por comentarme este detalle!! 😀
Vaya, muchísimas gracias por tus amables palabras *^_^*. Aunque el mérito de este blog es todo vuestro. No me canso de decir que tengo la gran suerte de contar con los mejores lectores de todo este universo y todos los demás. ¡¡Gracias por tu comentario!! 😀
Un abrazo bien grande!!!!!
Opino como tú, creo que hemos llegado a un nivel de «ofendido» que supera lo normal. Ya puedes tener cuidado con lo que dices que rápidamente te tachan de cualquier cosa que realmente no eres. Obviamente que hay límites en el humor, como en todo, pero estamos llegando a unos umbrales de absurdez que nunca antes había visto :’)
Visc a Barcelona! XD Des de fa molts anys a més XD No sabía que tu también vivías aquí. Por lo que me cuentas tu también viviste la época dorada del anime en català a TV3 y posteriormente en Canal 33. La verdad que fue una época increíble, yo conocí muchísimo animes en aquel entonces. Recuerdo que por las noches daban algunos de corte más adulto como Evangelion o Los Hermanos Dragón. Qué buena época. Seguro que entonces también conoces Dragon Quest, más conocido como Las Aventuras de Fly o Fly a secas, con aquella intro maravillosa que aún de vez en cuando me pongo por Yoututbe :’D
Y por supuesto, conozco los videojuegos en los que participó Toriyama, auténticas joyas con ese estilo suyo tan característico y maravilloso. Las cartas y los juguetes (así como los manga) están todos a buen recaudo. Prometo hacerle una sesión de fotos al Gogeta que te comenté, no sé como de trillado estará porque tiene más de 25 años, pero bueno, teniendo en cuenta que hablamos de plástico de los 90, seguro que está igual que cuando lo guardé XD
Un placer leerte de nuevo y de verdad que gracias a ti, me encanta el contenido que vas publicando. Te leo en la próxima, y quedan pendiente las fotos de Gogeta, a ver si esta semana saco un rato : D
¡¡Hola de nuevo Suso :D!!
Todo un placer y un honor tener la oportunidad de saludarte y escribirte, en respuesta a tu genial comentario. Ni que decir que me encantaron las fotos que me enviaste a través de Twitter con este genial Gogeta. ¡De verdad que me quedé sorprendido con la gran cantidad de articulaciones y movimiento que permite esta figura! :O. La verdad que la conservas en muy buen estado :D.
El tema de los «ofendidos»… buffff. Casi que prefiero no tocarlo en abierto por si acaso, aunque el tema tiene miga y me parece muy interesante. Me encantaría que pudiéramos tocarlo en privado. Por otro lado, opino que cada persona tendrá sus propias vivencias y valores que le llevarán a ofenderse, o no, por uno u otro tema, lo cual es muy respetable. Aunque me duele decir que cada vez más tengo la sensación de que el árbol no deja ver el bosque a un número mayor de personas a cada día que pasa, centrándose en un aspecto demasiado concreto en lugar de verlo todo en conjunto o en contexto, y lanzarse de cabeza a ello. Creo que se podría hacer mucho bien centrando toda esta energía y esfuerzo de tantos en un aspecto más productivo, incluso dentro de la misma causa que muchos dicen defender al mostrarse tan enfadados en las redes. Pero como se suele decir… esta es otra historia.
Volviendo a tu genial comentario, me hace muy feliz decir que, efectivamente, viví toda la era dorada de las series de animación tan míticas que se pudieron ver en su momento tanto en el canal TV3 como el C33, como por ejemplo Els Bobobobs, Els Barrufets, y muchas más, incluyendo mi queridísima Dr.Slump, o esta serie tan genial que comentas sobre Les aventures de Fly, basada en la genial franquicia de videojuegos Dragon Quest. De echo, y ruego me perdones por el autobombo, tengo un post al respecto en el blog. Además, también tengo muy buen recuerdo de otra gran serie que comentas y que se convertiría en una de mis favoritas: Evangelion, que yo vi por primera vez en la medianoche de los lunes en el Canal 33 gracias a un programa televisivo dedicado íntegramente a la animación y que me parece una verdadera lástima su cancelación en el horario de dicha cadena. Me estoy refiriendo al programa Toon-Toon, que no solo precedía al anime de Evangelion (y a la salvaje Kevin Spencer), sino que además contenía reportajes muy interesantes y series de animación de corte más underground, como Joe Paradise o la misteriosamente desaparecida Kozick’s Inferno, de la cual también escribí un post.
¡Madre mía que de recuerdos!, la verdad es que fueron buenos tiempos.
En fin compa, voy cortando con esta respuesta a tu genial comentario, pero en verdad opino que has tocado temas muy interesantes y me encantaría seguir con esta conversación.
Un abrazo bien grande 😀